Vivienda localizada en un lugar privilegiado dentro del Centro Histórico de Sevilla, frente a un bonito Convento patrimonio protegido.

Se encuentra en una planta baja de una reciente promoción de viviendas en las que predominaban los espacios neutros, con zonas comunes de paredes blancas, suelos porcelánicos tonos caliza, y celosías de madera pintadas en blanca. Destaca con el entorno patrimonial una cuidada vegetación de parterres que ayudaban a que la vivienda se volcara hacia el exterior. La propuesta de personalización de la vivienda parte de un programa de 2 dormitorios, dos baños y un salón-comedor separados de una estrecha cocina, estos dos últimos abiertos a un patio orientado a la torre de Convento vecino. La división entre estancias obligaba a un limitado uso de los espacios que obligaba a un comedor y salón de no más de 4 usuarios, y una comunicación poco fluida.

Se propone unificar salón y cocina, y unificar la isla como gran espacio vinculado al uso propio de cocinar como de sociabilizar. Localizar una gran isla de casi 3 m frente a la gran ventana del patio con vistas hacia el Patrimonio del entorno se convierte en el eje principal de la propuesta.

Se busca una arquitectura más vinculada a lo social y al confort que al estándar de distribución residencial habituales. Desaparece la mesa comedora como tal, compensando con esta gran isla y una mesa de altura media, de vidrio ahumado para permitir el uso del estar con el sofá como un comedor confortable.

La combinación de pocos elementos quiere crear una homogeneidad y ambiente cálido de contrastes. Suelo y panelados en pared y cocina de madera, que contrastan con madera pintadas en negro que mantienen su textura y beta natural, con vidrios ahumados que tamizan el paso de la luz.

Finalmente se decidió una combinación de tapizados de terciopelo azul ceniza y rojo oscuro que combinan con el color crema de sofá y cortinas. Esta misma combinación de acabaos se propone en los dormitorios, con cabecero de terciopelo azul ceniza, y mesitas de noches en madera con beta pintada en negro y vidrios ahumados. Manteniendo esa importante relación visual con el exterior.

La iluminación es parte fundamental de la propuesta, basada en la luz cálida indirecta con lámparas con pantalla en techo y de mesa, que acompaña los leds en vitrinas y espejos. Los baños finalmente han buscado mantener una combinación de porcelánicos con elementos cálidos tanto en mobiliario, como en acabados de pared en palillerías de roble natural.